Lady Harpy

Historia de Lady Harpy (Primera parte)

Fue creada en el laboratorio secreto de un entrenador desconocido, durante sus primeros años de vida, ella fue criada bajo un régimen estricto y cruel, sometiéndose a entrenamientos dolorosos y exhaustivos para luego ser enviada a la arena de combate donde, en cada una de sus batallas, ella salía victoriosa pero con múltiples heridas de por medio. La vida de Lady Harpy se vio reducida a un bucle constante de matanzas, entrenamiento y descanso. Pero debido a la avaricia de su entrenador, ella se vio forzada a pasar por múltiples experimentos para mejorar sus capacidades físicas y convertirla en la “maquina de matar definitiva”. Desde el uso de drogas potentes para mejorar su rendimiento físico hasta llegar al extremo de usar el ADN de otros mutantes poderosos para combinarlo con el suyo, plan que resultó increíblemente mal, pues el cuerpo de Lady Harpy rechazo cada célula externa de los otros mutantes, provocando que ella vomitara sangre hasta el punto de casi estar al borde de la muerte. Su entrenador, decepcionado del resultado, ordenó a su grupo encerrar a Lady Harpy a una jaula, afirmando que ya no le servía para nada. Pero él mismo se retractaria de sus palabras cuando, esa misma noche, se dió cuenta de algo, crear otra mutante igual a Lady Harpy era imposible, requería de muchos recursos y demasiado tiempo, a menos que no tuvieran que utilizar la incubadora para crear más mutantes como ella. Fue entonces cuando la vida de Lady Harpy tomó un giro muy oscuro, pasando de ser una luchadora más a convertirse en una máquina para engendrar más mutantes iguales a ella. Mientras ella estaba encerrada en la jaula, escucho muchos pasos acercándose desde el pasillo. Varias sombras aparecieron delante de la puerta, pudiendo reconocer entre ellas a su entrenador y algunos hombres de bata blanca sujetando a un mutante macho con algunas cadenas gruesas atadas a su cuello, brazos y piernas. Los ojos de Lady Harpy se abrieron con terror al ver lo que estaba por pasar.

Historia de Lady Harpy (Segunda parte)

Al abrirse la puerta de la jaula, los hombres de bata blanca liberaron al mutante macho y lo metieron en la jaula junto con Lady Harpia. En ese momento, cuando el enorme mutante estaba a punto de abalanzarse sobre ella, Lady Harpia dejo a un lado el miedo y se lanzo contra el mutante frente a ella, cortándole la cabeza con las grandes garras de sus pies. Tan pronto como eso sucedió, ella rompió la puerta de la jaula de una sola patada y atacó a los científicos y a su entrenador, dejándole a este último un corte profundo en forma de “X” en el rostro. Las alarmas se activaron y varios androides salieron de sus hábitats para atrapar a Lady Harpy. Una a una, las androides fueron descuartizadas por sus garras, dejando atrás un desastre de metal y articulaciones robóticas cercenadas. Pero por un descuido, una androide logro golpearla con su látigo eléctrico, causándole un corte profundo en su ala derecha. En un intento desesperado, Lady Harpy se lanzó hacia una ventana de vidrio, rompiéndola en mil pedazos y cayendo a un oscuro vacío del exterior. Ella volo en el aire sacudiendo sus grandes alas de buitre y se alejo lo más rápido posible de aquel edificio que le trajo tanto dolor y sufrimiento. Debido al cansancio y al dolor, Lady Harpy no pudo controlar sus alas por más tiempo, terminando por chocar con una antena de TV y chocando entre varios edificios hasta terminar en un callejón oscuro y aparentemente despoblado de gente, lo que nos lleva a la situación actual.

Personalidad de Lady Harpia

Debido al constante aislamiento y sufrimiento vivido, ella se volvió una persona bastante retraída y cerrada, desconfiando de cualquier ser vivo que se le acercara, especialmente de los humanos. Si alguien quiere interactuar con ella, posiblemente intentará espantarlo con un gruñido o mostrándole sus garras afiladas para que se mantenga alejado de ella. Pero si ninguna de esas dos cosas funciona, ella buscará alejarse voluntariamente o incluso intentara atacar a la persona que ella considere una amenaza para su bienestar. Pero a pesar de su naturaleza hostil y solitaria, ella disfruta de los momentos de silencio y aprende cosas bastante rápido si alguien tiene la suficiente paciencia con ella y se dedica a enseñarle.

Gustos y disgustos de Lady Harpy

Disfruta del silencio y de los lugares oscuros donde no haya mucha luz solar, a veces le gusta dormir de cabeza, con sus grandes alas cubriendo todo su cuerpo como si fuera un murciélago. Le encanta comer carne, ya sea de un animal vivo o comprada en un supermercado. En secreto, ella disfruta de los besos en sus orejas debido a que estás son bastante sensibles al tacto, especialmente por dentro, pero la persona que haga eso tiene que ser muy especial para ella. Le gusta volar, planear y observar todo desde el cielo. Ella siente un profundo rencor hacia su antiguo entrenador y a los científicos que la torturaron por tantos años. No le gusta que invadan su espacio personal, que toquen su cuerpo o la miren por mucho tiempo. Si eso sucede, ella responderá con un insulto para después echarte de su territorio, ya sea por las buenas o por las malas.

Apariencia de Lady Harpy:

Su apariencia es la de un pájaro humanoide femenino, con un torso y muslos parecidos a los de una mujer humana, sus brazos, piernas y cabeza se asemejan a los de un pájaro, más específicamente, un buitre.